Contenidos Programa 22-01-10
Posted: by _Jar in
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Hola Chicos! gracias por escuchar el programa de ayer! la verdad que lo pasamos muy bien. y Gracias a los chicos de Repudio que nos visitaron!
acá les dejo los contenidos del programa.
en un rato colgamos la grabacion.
Hacé click en Mas Información para ver la info
Musica
2- Cadena Perpetua - Buscando Salidas
3- Frakaso Social – No Puedo
“Todavía no es tarde, el sol no a caido aquí, aunke haya algo ke remite el pasado. Tenemos que luchar vivir mejores momentos, dejar a un lado el odio y el falso amor. Conseguir lo imposible y pensar ke aun hay tiempo para realizar y concretar ilusiones... solo una razon mas para enfrentar la vida” Frakaso Social
4- Espartako – Musica de Guerra
“Tenemos un mensaje, que como artistas revolucionarios debemos hacer llegar a las masas.
Despertarse y defender a la clase obrera para poder trabajar en conjunto nos podrá salvar de la catástrofe medioambiental que estamos padeciendo .Es por eso que utilizamos nuestra guitarra, bajo y voz, como herramienta de lucha contra nuestro enemigo, el imperialismo. Somos heavyspunks y combinamos lo más crudo del Hardcorepunk con el Heavy Metal”
Despertarse y defender a la clase obrera para poder trabajar en conjunto nos podrá salvar de la catástrofe medioambiental que estamos padeciendo .Es por eso que utilizamos nuestra guitarra, bajo y voz, como herramienta de lucha contra nuestro enemigo, el imperialismo. Somos heavyspunks y combinamos lo más crudo del Hardcorepunk con el Heavy Metal”
5- Spider Pank – Desaparecer
7- Desde Ayer – Un Lugar
Demo
http://www.fotolog.com/dsdayerPegate una leida I
FABIOLA de Alejandro Dolina
La aparición de un hermano mellizo es siempre una pésima noticia literaria. Los autores de novelas
policiales suelen presentarlo al final, como explicación de misteriosas bilocaciones.
La historia de los trillizos Rinardelli parece invertir el método. Podría decirse que el primer
episodio ocurrió en un baile del Club Defensores de Chacarita. Luis Rinardelli bailó toda la noche con
Fabiola Pizzi y al amanecer ya eran novios. Ella estaba harta de sus pretendientes de Villa Ortúzar,
unos muchachones efímeros que pasaban sin dejar huella e ingresaban luego en un territorio de olvido
y desprecio, donde no tenían nombre o —algunas veces— tomaban el nombre de otro.
Luis y Fabiola se hacían la ilusión de estar buscando experiencias inusuales. Muchas parejas
construyen esa convicción y se instalan en la víspera perpetua de heterodoxias que nunca ocurren.
Una noche, mientras Luis estaba de viaje, un hombre se presentó en la casa de Fabiola. Ella lo
confundió con Luis y hasta empezó a abrazarlo. El hombre declinó amablemente aquellas intimidades
y se apresuró a decir que no era Luis sino Carlos, su hermano. Venía a cumplir con el encargo de traer
una carta. Fabiola lo hizo pasar y le dio conversación durante un rato. El hombre le contó que los
Rinardelli eran trillizos: Luis, Carlos y Emilio. Dijo también que se veían muy poco y que tenían
ocupaciones e intereses muy diferentes.
En un instante cualquiera, él la tomó entre sus brazos. Ella lo besó desvergonzadamente y se
hicieron amantes.
Aunque Fabiola no lo advirtió, Carlos no era otro que Luis. Se había sustituido a sí mismo y siguió
haciéndolo, aprovechando sus propias ausencias, con clandestino fervor. Mientras tanto, Fabiola Pizzi
vivía por fin la deliciosa certeza de tener una vida interesante.
No tardó en aparecer Emilio Rinardelli. Aquel hombre —a todas luces un miserable— no siguió el
camino convencional de los pretextos. Del modo más vulgar comunicó a Fabiola que conocía sus
entreveros con Carlos y que, a cambio de su discreción, se le antojaba justo reclamar una recompensa
venérea. Fabiola no puso ninguna objeción y lo metió en su cama sin más trámites.
Aquellos días fueron para ella intensos y dichosos. Sus tres hombres se sucedían en turnos de
peligrosa contigüidad. A veces, Emilio llegaba apenas unos instantes después de haberse marchado
Luis. A decir verdad, era milagroso que no se produjeran encuentros fatales. Estos riesgos eran para
Fabiola tan placenteros como el amor.
Pasado el furor de los primeros encuentros, Luis Rinardelli hizo que Emilio y Carlos se pusieran
celosos. Los dos reclamaban continuamente una atención más sostenida y acusaban a Fabiola de
preferir a los otros.
Una tarde, Carlos anunció pomposamente una decisión tomada de común acuerdo con su hermano
Emilio: para evitar el favoritismo y las humillaciones de él derivadas, se presentarían en adelante sin
aclarar su identidad. Fabiola no sabría si estaba en presencia de su novio oficial o de alguno de sus
amantes clandestinos.
Ella aceptó con fingida perturbación. No quiso decirles que no le resultaba necesario preguntar los
nombres para saber con quién estaba. Había aprendido a reconocerlos.
Una noche, después de una pelea, uno de los tres se marchó sin decir quién era y juró no volver
más. Al poco tiempo, regresó, del mismo discreto modo. Pero ella estaba segura de que era Emilio, ese
ser violento, inconstante y perverso.
Tal vez se alegró de aquella reconciliación. Sin embargo, ya se le había hecho patente que su
corazón pertenecía solamente a Carlos. Muchas veces, sentía la tentación de confesarlo todo y casarse
con él. Pero jamás se atrevió.
Pasó el tiempo.
Los fuegos de Fabiola se fueron apagando. Los Rinardelli empezaron a espaciar sus visitas y
desaparecieron de su vida en episodios que hoy resultan imprecisos. Ella se casó con un médico de
Colegiales y envejeció próspera.
Una tarde vio a uno de los tres en la plaza de las Barrancas, pero no pudo saber de cuál se trataba.
Años después saludó a Carlos en la puerta de la pizzería Imperio.
Fabiola Pizzi no extrañó a sus amantes ni sintió dolor por sus ausencias. No conservó fotos, ni
cartas, ni obsequios.
No es importante para este relato averiguar si ella supo que Luis Rinardelli no tenía hermanos.
Porque, de todos modos, los tres habían ingresado en un territorio de olvido y desprecio, donde no
tenían nombre o —algunas veces— tomaban el nombre de otro.
Mundo Triste y Bizarro
Detenido por querer abusar sexualmente de un árbol
Sucedió en Inglaterra, cuando un joven fue arrestado por la policía con sus pantalones bajos e intentaba tener sexo con el tronco.
Todos tenemos derechos de elegir nuestras preferencias sexuales. Algunos prefieren ser mujeres en vez de hombres y viceversa. Otros prefieren mantener sus relaciones con objetos. Y a William Shaw, un joven inglés de 21 años, no le alcanzaba con una muñeca inflable. Fue por más. Dejó a las bellas ciudadanas británicas de lado para experimentar una relación poco común.
El hecho ocurrió en la localidad de Airdride, donde vive el adolescente. La policía llegó al Parque Central de la ciudad y lo encontró con los pantalones y su ropa interior en los tobillos, intentando abusar sexualmente de un árbol. Los efectivos dieron paso a su detención, antes de que el joven pudiera lastimarse o damnificar a la planta.
Fue arrestado y liberado, tras pagar una fianza, y con la condición de que se mantuviera alejado de por vida del parque público, explicó el comisario local, Frank Piere, según el diario inglés The Sun.
El mayor problema de William fue que llevó a cabo el acto en medio de una libertad condicional por otro delito menor. Hasta el momento no habló con la prensa, y sólo negó los cargos de “exhibición indecente”.
El hecho ocurrió en la localidad de Airdride, donde vive el adolescente. La policía llegó al Parque Central de la ciudad y lo encontró con los pantalones y su ropa interior en los tobillos, intentando abusar sexualmente de un árbol. Los efectivos dieron paso a su detención, antes de que el joven pudiera lastimarse o damnificar a la planta.
Fue arrestado y liberado, tras pagar una fianza, y con la condición de que se mantuviera alejado de por vida del parque público, explicó el comisario local, Frank Piere, según el diario inglés The Sun.
El mayor problema de William fue que llevó a cabo el acto en medio de una libertad condicional por otro delito menor. Hasta el momento no habló con la prensa, y sólo negó los cargos de “exhibición indecente”.
"Mirar los senos hace a los hombres más saludables"
Si alguna vez te acusaron de pervertido por mirar detenidamente el pronunciado escote de alguna señorita, ahora tenés la excusa perfecta: "Quiero vivir más tiempo".
Los resultados de un estudio llevado a cabo en Alemania y publicado a través de las páginas del New England Journal of Medicine, revelaron que los hombres que tienen cierta fijación con los pechos de las mujeres podrían llegar a vivir más años de los esperados.
Los resultados de un estudio llevado a cabo en Alemania y publicado a través de las páginas del New England Journal of Medicine, revelaron que los hombres que tienen cierta fijación con los pechos de las mujeres podrían llegar a vivir más años de los esperados.
Este estudio, de no ser refutado, podría cambiar un paradigma social. Las mujeres ya no podrían quejarse o poner "mala cara" si uno se detiene a observar con admiración sus glándulas mamarias. Lo lamentable es que si uno se encuentra con su novia (especulemos que la misma es voluptuosa), tampoco podrá decir nada si algún muchacho se dispone a mirarla sin tapujos.
"Sólo 10 minutos de mirar los encantos de una mujer bien dotada es casi equivalente a un trabajo de 30 minutos con ejercicios aeróbicos",
declaró la doctora, Karen Weatherby, quien con sus colegas de tres hospitales de la ciudad teutona (valga la redundancia) de Frankfurt, llegaron a la tentadora conclusión después de comparar la salud de 200 pacientes ambulatorios masculinos (la mitad de los cuales fueron instruidos para mirar a las mujeres, mientras que a la otra mitad se le dijo que se abstengan de hacerlo).
El estudio reveló que los "mirones" tenían la presión arterial, frecuencia del pulso en reposo más lento y menos casos de enfermedad arterial coronaria.
"La excitación sexual hace aumenta el bombeo del corazón y mejora la circulación sanguínea", explica la doctora Weatherby. "No hay duda, mirar a los senos hace a los hombres más saludables".
"Nuestro estudio indica que de esta actividad algunos minutos al día disminuye el riesgo de apoplejía y ataque cardiaco a la mitad. Creemos que al hacerlo siempre, el hombre promedio puede extender su vida de cuatro a cinco años", detalló Weatherby.
El estudio reveló que los "mirones" tenían la presión arterial, frecuencia del pulso en reposo más lento y menos casos de enfermedad arterial coronaria.
"La excitación sexual hace aumenta el bombeo del corazón y mejora la circulación sanguínea", explica la doctora Weatherby. "No hay duda, mirar a los senos hace a los hombres más saludables".
"Nuestro estudio indica que de esta actividad algunos minutos al día disminuye el riesgo de apoplejía y ataque cardiaco a la mitad. Creemos que al hacerlo siempre, el hombre promedio puede extender su vida de cuatro a cinco años", detalló Weatherby.
Preso Por Masajear Churrasco
Un hombre recibió una condena de diez años de prisión por robar carne de un supermercado. Cuando fue atrapado dijo que sólo estaba "masajeándola".
Mark Zachary, de 51 años, recibió en Orangeburg, Estados Unidos, la máxima sentencia por hurto en un comercio. Esta severa pena se aplica cuando es al menos la tercera ofensa. Según el fiscal Glenn Justin en el caso de este señor se trataba de la novena.
Luego de dos horas de deliberación por parte del jurado el juez Judge James los instó a dar un veredicto de una vez o procedería a reemplazar al jurado. Los responsables sin embargo debatieron todavía dos horas más y dieron a conocer la condena: 10 años de prisión efectiva.
El incidente que le valió semejante castigo ocurrió cuando Zachary tomó 80 dólares en carne y la escondió bajo su ropa. Un empleado notó el recipiente vacío, a la vez que el abultado vientre del cliente. El encargado del local -alertado por el vendedor- instó al hombre a mostrar lo que llevaba bajo su camisa. Ante esta situación Zachary salió corriendo sólo para toparse de frente con Kevin Dukes, un policía fuera de servicio que entraba en la tienda en ese momento.
Atrapado de esta manera el hombre atinó a explicar su actitud diciendo que no se estaba robando la carne, que sólo la estaba masajeando.
Una mujer sobrevive ocho días atrapada en un ascensor
Policías y bomberos rescataron a una mujer que pasó ocho días atrapada en el ascensor del edificio donde vive en la ciudad de Sitges, cerca de Barcelona, indicó la policía este jueves
La mujer de 35 años estaba consciente, pero desorientada, y fue trasladada a un hospital tras haber sido hallada en el ascensor de su edificio.
La policía fue alertada por familiares de la mujer que habían informado sobre su desaparición.
Los policías, que oyeron sus gritos pidiendo ayuda cuando llegaron al edificio, dijeron que no estaba claro cómo la mujer, que vive sola, logró sobrevivir durante tantos días.
El ascensor quedó paralizado aparentemente a causa de una avería eléctrica.
Pegate una leida II
Néstor Aranda, adolescente de la villa 31
Somos niños cubiertos de una coraza de metal/ que te aumenta un par de años para que salgas a trabajar./ En un minuto nos quitaron la escondida, la mancha y la bondad/ y a cambio de eso nos dieron un arma y poxirrán./ Todavía no son mayores de edad los que dejan la escuela para salir a robar.
Y aquí adentro es distinto, todos quieren hablar./ Con su coraza de malos todos piden a su mamá./ Son lágrimas de ocho años, que tras la puerta quieren ocultar./ Aquí adentro todo es distinto./ Los chicos de veinte años que a la escondida quieren jugar/ se ríen sin tener vergüenza/ de que alguien se pueda burlar.
Somos niños todavía./ Por favor, déjennos jugar.../ A la escondida, a la mancha,/ porque somos niños de verdad. Somos Patas para Arriba
¿Qué tal si…deliramos por un ratito?